Tema abordado por el licenciado Abdiel Iván Batista Castillo, quien es guía naturalista especialista en parques nacionales y áreas protegidas, maestro instructor de búsqueda y rescate en selvas y montañas, maestro instructor de primeros auxilios para áreas remotas y docente universitario en temas de turismo.
El turismo de aventura es un tipo de turismo, como el turismo cultural o el ecológico. Se trata de la actividad turística que implica un viaje hacia un área remota o que incluye un plan donde pueden acontecer hechos inesperados.
Como primer punto, el licenciado nos mostró un mapa donde se presentan los sitios que son patrimonio de la humanidad, las áreas protegidas, las selvas, etc.
Nos menciona que se han descuidado mucho estos sitios. Panamá cuenta actualmente con tres sitios considerados patrimonios de la humanidad. El Parque Nacional de Coiba fue el último en ser declarado.
Panamá posee sitios que permiten que el turismo de aventura se desarrolle efectivamente, ya que contamos con mucha vegetación y animales exóticos.
Lamentablemente, la acción humana ha estado modificando y quitándole terreno a estos sitios debido a que necesitan expandir los terrenos para la construcción de edificios, etc.
A pesar de que el país posee muchas zonas verdes, estas están cada vez desapareciendo debido al descuido y a la acción humana.
Actualmente contamos con animales que están en peligro de extinción.
También se mencionó el Parque Summit el cual, a pesar de ser un sitio donde deberían de abundar los animales, estos están cada vez desapareciendo.
Hay un proyecto para la renovación del sitio pero no está del todo diseñado. Solo se tiene la primera fase que consta de la entrada del parque.
Según el ranking mundial de países megadiversos, Panamá ocupa el 28avo lugar. A pesar de que Panamá cuenta con muy poco territorio, posee una gran variedad de aves comparado con Brasil quien cuenta con casi la misma cantidad que nosotros, contando con una superficie territorial mayor.
Nos mencionó también de un proyecto nombrado EcoTur, que busca hacer de las áreas protegidas más sostenibles. Este proyecto incluye a nueve áreas protegidas y es financiado por la ATP, la ACP, etc.
Recientemente, se han aprobado una serie de estándares de sostenibilidad que buscan impulsar estas áreas verdes sin afectarlas. El cumplimiento de estos estándares es opcional, no es de carácter obligatorio.